miércoles, 28 de diciembre de 2011

Mi regalo de navidad...

Cuando era pequeño, en estas fechas solía dejarme entrar más en mis sentimientos, para cabalgar por mis emociones y sentir cada pequeña pasión, pero sobre todo, ser feliz, por mi y por ti. En este año como en todos los demás, estaré siempre para quien me necesite, y porqué no, aunque no se me necesite seguiré estando siempre aquí, porque quiero estarlo y porque necesito que todos seamos un poquito más feliz... 

Directamente a tu corazón, pasando por mis sentimientos, directamente a tus emociones, caminando por los grandes corazones, directamente a ti, que te deseo toda la felicidad, que te mereces por ser tú, con toda tu claridad y sinceridad. Hoy, como te dije antes, de nuevo estoy aquí, para desearte felicidad, y apoyarte en tus sueños para que con un poco de ilusión se te hagan realidad. Para desearte todos tus éxitos y acompañarte en tus alegrías, de nuevo estoy aquí y siempre estaré aquí para desearte una Feliz Navidad.

Que seas feliz todos los días, que la sonrisa sea tu compañía, que la tristeza sólo sea recuerdo, que los sentimientos no te abandonen, que de vez en cuando lleguen a ti las más bellas emociones, que siempre seas todo amor,y que yo pueda compartir contigo los bellos sonidos de todo corazón.

FELIZ NAVIDAD! ^^


martes, 27 de diciembre de 2011

Amor Inolvidable...

En el buzón de mis melancolías, buscaban mis ojos el silencio de los tuyos, en un roce de reflejo de tu voz callada en la garganta... abierto el ángulo de todos mis recuerdos; cuando caminé por la arena de tus playas, cuando nada dolía... y el verso que nacía de tus manos era fragancia mística de sueños. 

Noches donde robaba un tiempo de tu tiempo, para dibujar en tu cielo  mis gaviotas con alas y juegos, mis ríos con sabor a secretos. Jugábamos a ser aves desplegando alas en señal de abrigo a nuestras horas repletas de nostalgia, enredaderas de besos entregamos en caricias de tus lágrimas, cual perlas tapizadas de encanto.

Tus ojos... luz en calma a mi mirada, enrejadas sombras en mis noches durmiéndose la luna en el cuerpo de nuestro silencio. Y te perdías... como se pierde una estrella en el firmamento del recuerdo, te perdías, como el mar se esconde en lo infinito... y ya no hay barcas de tus besos anclados en mi puerto... y ya no hay desvelos de poemas tatuados en mis manos. Estas manos que sellaban a las tuyas y en aquietados juramentos navegaban en el mar... ¡De todos nuestros versos!.

Y te perdías... como las olas abandonan el camino de la arena extraviado entre letras, ésas donde encontré por vez primera nitidez de las auroras extasiando la ausencia. Para que el olvido no duela, para que si un día al regresar... si existiese tiempo y espacio en nuestro libro de añoranzas.

Publiques, en odas de almanaques despiertos en el santuario de versos olvidados.Todo el amor que por amor, fui y volví a ser aún sabiendo... que jamás existí en tu pensamiento. 

El niño que le contó su vida a la luna una mágica noche de verano..

Era una cálida noche de verano, la luna se alzaba sobre el cielo de una forma tan espectacular que resultaba vertiginoso mirar hacia ella. El calorcito tipico de la época hizo que un niño, se asomara a su patio para poder contemplar a la grandisima dama de la noche. Una vez allí, sumergido en un momento de profunda meditación, le confesó que se había enamorado, que sentía como se despertaba cada una de sus terminaciones nerviosas al hablar con la persona de su vida. Sabía que era algo grande lo que se le venía encima, tenía miedo, pero decidió salir adelante. Se supone que correr riesgos no es lo mismo si se hace pensando en la persona sobre la cual gira tu vida, o al menos eso es lo que sientes. Pues bien, aquella noche todo empezó, la situación daba todo de sí para que fuera un momento realmente mágico, un momento que difícilmente se repetiria alguna vez en la vida, ese momento en el que esos sentimientos que atraviesan tu cuerpo sientes que quieren salir, abrirse paso entre las estrellas del firmamento para poder gritar con todas las fuerzas ese tan aclamado, tan mágico TE QUIERO...